Cuando mi suegra vino a casa: el día que todo cambió para siempre
Nunca imaginé que la visita de mi suegra, Carmen, desataría una tormenta que pondría a prueba mi matrimonio y mi propia identidad. Aquella tarde, entre gritos y reproches, descubrí secretos familiares que me hicieron cuestionar todo lo que creía saber sobre el amor y la lealtad. Ahora, al mirar atrás, me pregunto si alguna vez podré perdonar o si el rencor será mi única herencia.