«Papá, por favor, deja de venir sin avisar: Cómo las visitas de mi padre tensionan nuestro matrimonio»
Marcos nunca entendió la frustración de su esposa hasta que la experimentó en carne propia. Su padre, que solía irse antes de que Marcos regresara del trabajo, se convirtió en un visitante frecuente durante el tiempo libre de Marcos. Cada tarde, Tomás aparecía sin avisar, interrumpiendo su rutina. Los fines de semana, sus visitas eran aún más frecuentes.