No soy solo abuela: entre sacrificios y silencios
Me llamo Carmen y, tras dos años cuidando a mis nietos para ayudar a mi hijo y a mi nuera, siento que he perdido mi propia identidad. Mi vida se ha convertido en una rutina de sacrificios silenciosos, donde mis deseos quedan relegados a un segundo plano. Ahora me pregunto si alguna vez podré recuperar la mujer que fui antes de ser solo ‘la abuela’.