Cuando el silencio duele más que las palabras: Mi historia con la familia de mi marido
Desde el primer día que crucé el umbral de la casa de los padres de Miguel, supe que nunca sería una más. A pesar de mis intentos por integrarme y ayudar, siempre sentí el peso de la indiferencia. Esta es la historia de cómo aprendí a poner límites cuando el cariño no es recíproco.