Adiós, pero no olvides tu basura: El día que Tomás encontró mi cabello en la silla
Todo comenzó con una pelea absurda, pero terminó revelando secretos que nunca imaginé. Mi relación con Tomás se desmoronó por un simple cabello, pero detrás de ese detalle insignificante se escondían años de desconfianza y heridas familiares. Ahora me pregunto si alguna vez podremos perdonarnos y reconstruir lo que se rompió.