El día que dejé de contestar el teléfono: La historia de Carmen
Durante años fui la mujer a la que todos acudían, la que resolvía problemas ajenos y olvidaba los propios. Un día, agotada y al borde del colapso, decidí apagar el móvil y dejar de ser la salvadora de mi familia. Ahora, a mis 61 años, por fin descubro lo que significa vivir para mí misma, aunque el precio haya sido alto.